Museo del Telégrafo






El telégrafo, introducido en México a mediados del siglo XIX, permitió conectar lugares y personas de todo el país. Gracias a la inversión tanto privada como pública se amplió la red telegráfica, mejorando la comunicación y el control del territorio. La red telegráfica mexicana no sólo estaba formada por instrumentos, cables, postes y cuadros de distribución, sino también por las personas que la operaban y utilizaban, así como por los intereses políticos y económicos asociados. Todo esto contribuyó significativamente a la construcción del territorio nacional. 


El Museo del Telégrafo ofrece la historia de la telegrafía en México, nos permite apreciar las dimensiones de esta tecnología además de conocer y enriquecer nuestras ideas respecto a los objetos y la ruptura cultural que significa la inmediatez de la comunicación, la transmisión de la palabra y la modificación. en la percepción social de las distancias, de manera sorprendente para la humanidad.





En el espacio que ocupo se ubica la primera oficina de telégrafos del país, el cual posee una gran belleza arquitectónica, siendo un claro ejemplo del estilo ecléctico. En él podrás encontrar aparatos telegráficos de diferentes épocas, así como réplicas de telegramas importantes. La presentación de estos elementos es minimalista, lo que en mi opinión resulta muy atractivo visualmente.

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